domingo, noviembre 26, 2006

Tu mundo y el mío


Hay un mundo donde amar con cada célula de tu cuerpo no es suficiente.
Un mundo donde dejarlo todo por amor no basta.
Donde el vacío te atraganta y te quita el habla.
Te consume, te destruye.

Ése no es mi mundo.

Quiero un mundo donde la pasión me desborde.
Un mundo donde el amor no duela, sino que me haga estallar el corazón y las costillas y los pulmones.
Donde esa implosión inmensa me reconstruya.
Me renueve, me reviva.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es curioso, hoy hablaba de eso con un amigo y llegué a la conclusión de que sí, efectivamente a veces es tormentoso y entre más se quiere a alguien el perderla duele mucho más. Es por eso que al final cuando por fin logres encontrar lo que buscabas, se volverá tan especial, tanto como el hallazgo de ese tesoro el que nunca creimos encontrar.

Anónimo dijo...

Hoy Soledad ha regresado a casa. En realidad no sé si la extrañaba o no, quiero creer que en realidad es la única que me entiende y sabe en el fondo quién y como soy y, a pesar de todo, esta junto a mi. La mayor duda que tengo ahora es, si en este tiempo en el que ella estará junto a mi, al fin lograré quererla o nuevamente la aborreceré tal como lo hice hace algunos meses.
No sé, tal vez sea el destino que el que me tiene atado a ella, o simplemente mi poca habilidad de entender el por qué está junto a mi.
Ahora sólo me resta darle la bienvenida, y recibirla con gusto y alegría ya que al final ella es la que ha decidido regresar a mi.