domingo, enero 15, 2012

Al borde del camino del mundo hay un rosal


Al borde del camino del mundo hay un rosal muy grande, infinito, que se alza hacia el inmenso azul... Por el camino del mundo pasa la humanidad como una ola de carne.

... Hay quién habiendo seguido el camino, rosal arriba, sin reparar en nada, sin prevenirse, sólo siguiendo y escuchando los latidos de su corazón enamorado, caen a veces por su deslumbramiento, a veces porque bajo ellos la humanidad como ola de carne se empuja en el camino del mundo, y ellos han querido huir encaramándose en el aire, quizá demasiado en el aire por lo abajo que está la humanidad y la humanidad no los ha comprendido y han de morir, y mueren, mueren con el corazón atravesado por una de las mil espinas del rosal que se alza al borde del camino del mundo y que conduce a unas rosas que desde la tierra no se abrieron.

Y éstos, con el corazón sangrante, mueren sonriendo, pues aunque su cuerpo ha vivido menos y peor que la humanidad, su corazón y su alma han vivido eternamente y han gozado de las dulzuras incomparables del crear, el mal punzante de la espina de ese rosal aún les place y mientras duermen ruegan a Dios que les vuelva a hacer nacer para volver a morir con la misma espina.

Salvador Dalí

1 comentario:

Anónimo dijo...

Flowers are restful to look at. They have neither emotions nor conflicts.
Sigmund Freud