jueves, noviembre 30, 2006

Kafka


Kafka nos ha enseñado que con frecuencia las cosas más atroces se revelan en mundos aparentemente normales.

Juan José Millás en una entrevista para el periódico.

domingo, noviembre 26, 2006

Tu mundo y el mío


Hay un mundo donde amar con cada célula de tu cuerpo no es suficiente.
Un mundo donde dejarlo todo por amor no basta.
Donde el vacío te atraganta y te quita el habla.
Te consume, te destruye.

Ése no es mi mundo.

Quiero un mundo donde la pasión me desborde.
Un mundo donde el amor no duela, sino que me haga estallar el corazón y las costillas y los pulmones.
Donde esa implosión inmensa me reconstruya.
Me renueve, me reviva.

sábado, noviembre 18, 2006

You don't need this disease


If something has to change then it always does.
You don't need this disease, not right now.
If something has to give then it always will.
You don't need this disease, not right now.
No, you don't need this disease.
Not right now, no, no, not right now.

Editors: Bullets

domingo, noviembre 12, 2006


Esta bien recordar
porque siempre hace falta a quien culpar
y el tiempo nos rebasa lento
esta bien no pensar
pero resulta una contrariedad
si por adentro estas ardiendo

Piensas que se te escapa el tiempo
y entras en descontrol
en llamas pasas rasgando el cielo
y estas en descontrol

Esta bien suspirar
pero si ya se ha ido que mas da
si hay que morir en el intento
y esta bien querer volar
pero este viento de tu necedad
siempre regresa a este momento

Piensas que se te escapa el tiempo
y entras en descontrol
en llamas pasas rasgando el cielo
y estas en descontrol

Fobia: Descontrol

viernes, noviembre 10, 2006

Mateo


Querido Mateo:
Tal vez no querías llamarte Mateo, ni Emilio, ni tener 2 nombres porque seguro habrías odiado uno (y para mí eres Matt, de cualquier manera). Tal vez te diste cuenta de que las cosas estaban díficiles, complicadas, y decidiste regresarte, esperar un poco. Tal vez todavía no era el momento, todavía no era tiempo de que llegaras, quién sabe. Y hablando de tiempo, disculpa el adelanto, o atraso, según como lo veas. Yo pensaba escribirte más tarde, pero ya ves, algún día habrías aprendido también que esperar no siempre es tan bueno y que a veces se nos hace tarde, tal vez demasiado tarde, para muchas cosas.
Me gusta pensar que las cosas pasan por algo. Acá de este lado así somos: nos gusta creer, en lo que sea, pero creer, para llevárnosla más tranquila, para tener de dónde agarrarnos, a dónde volver cuando estamos perdidos.
Hoy fué un día gris. El día que te fuíste fue gris, y la noche algo fría. Habrías aprendido que ya por estas fechas el clima es así, y con días como este no queremos hacer nada. En realidad nunca queremos hacer nada. Dicen que la gente es como el clima en el que viven, yo no sé, a veces creo que es cierto, a veces no. También dicen que los que se van como tú te fuiste deciden quedarse allá con los ángeles, como un ángel, para cuidarnos a los de acá. Tal vez decidiste que desde allá cuidarías mejor de tu mamá, y qué suerte, porque sabrás que acá de este lado nunca nos viene mal tener algún contacto con las alturas que nos ayude y nos eche la mano. Supongo que esa fué la misión que te fue encomendada. Acá nos cuesta tanto encontrar la nuestra.
Una persona que quiero mucho me dijo que justo hoy se había marchitado la última rosa de las seis que le dí, y yo le dije que fué porque, al irte tú, algo se marchitó en mí también. Así somos acá también. Nos vamos llenando de pequeñas cositas, buenas y malas, y así de poquito en poquito nos vamos vaciando también. Somos como esos mosaicos a los que les falta alguna piedrita por aquí o por allá.
En fin, te diría que te cuides, pero tú estás ahora mejor que nosotros. Cuídanos tú.
A tu mamá cuídala mucho.
Te vamos a echar de menos, pero quién sabe, tal vez algún día por allá nos veamos.
Hasta entonces.

jueves, noviembre 09, 2006

Hormiga


Gracias por enseñarme la amistad.
Gracias por regalarme tu amistad.
Gracias por los sándwiches, las galletitas, el té de manzana.
Gracias por mis dos kilos de más.
Gracias por escucharme,
por compartir mis problemas,
por compartirme los tuyos,
por tu confianza,
por tus consejos,
por toda tu ayuda.
Gracias por colaborar con este blog,
por ser mi lectora #1.
Esto es para tí.

Componte amiguita.
(todavía me debes una ida al cine)

miércoles, noviembre 08, 2006

Poeta colectivo en la ciudad del caos


Un autobús del sistema de transporte colectivo Metro tenía escrito en un costado el nombre de "Xavier Villaurrutia" sin mayor alusión a otra cosa.
Para celebrar este magnífico acontecimiento, me permito poner aquí fragmentos de la obra del poeta.

Nocturno de la estatua

Soñar, soñar la noche, la calle, la escalera
y el grito de la estatua desdoblando la esquina.

Correr hacia la estatua y encontrar sólo el grito,

querer tocar el grito y sólo hallar el eco,
querer asir el eco y encontrar sólo el muro
y correr hacia el muro y tocar un espejo.
Hallar en el espejo la estatua asesinada,
sacarla de la sangre de su sombra,

vestirla en un cerrar de ojos,
acariciarla como a una hermana imprevista

y jugar con las flechas de sus dedos

y contar a su oreja cien veces cien cien veces
hasta oírla decir: «estoy muerta de sueño».



Nocturno en que nada se oye


En medio de un silencio desierto como la calle antes del crimen
sin respirar siquiera para que nada turbe mi muerte
en esta soledad sin paredes
al tiempo que huyeron los ángulos
en la tumba del lecho dejo mi estatua sin sangre
para salir en un momento tan lento
en un interminable descenso
sin brazos que tender
sin dedos para alcanzar la escala que cae de un piano invisible
sin más que una mirada y una voz
que no recuerdan haber salido de ojos y labios
¿qué son labios? ¿qué son miradas que son labios?
Y mi voz ya no es mía
dentro del agua que no moja
dentro del aire de vidrio
dentro del fuego lívido que corta como el grito
Y en el juego angustioso de un espejo frente a otro
cae mi voz
y mi voz que madura
y mi voz quemadura
y mi bosque madura
y mi voz quema dura
como el hielo de vidrio
como el grito de hielo
aquí en el caracol de la oreja
el latido de un mar en el que no sé nada
en el que no se nada
porque he dejado pies y brazos en la orilla
siento caer fuera de mí la red de mis nervios
mas huye todo como el pez que se da cuenta
hasta ciento en el pulso de mis sienes
muda telegrafía a la que nadie responde
porque el sueño y la muerte nada tienen ya que decirse.

martes, noviembre 07, 2006

Nubes


Las penas son como nubes tormentosas: vistas desde lejos parecen negras, pero cuando estan encima de nuestras cabezas apenas son grises.

lunes, noviembre 06, 2006

El peatón


Se dice, se rumora, afirman en los salones, en las fiestas,
alguien o algunos enterados, que Jaime Sabines es un
gran poeta. O cuando menos un buen poeta. O un poeta
decente, valioso. O simplemente, pero realmente, un
poeta.
Le llega la noticia a Jaime y éste se alegra: ¡qué maravilla!
¡Soy un poeta! ¡Soy un poeta importante! ¡Soy un
gran poeta!
Convencido, sale a la calle, o llega a la casa, convencido.
Pero en la calle nadie, y en la casa menos: nadie
se da cuenta de que es un poeta. ¿Por qué los poetas no
tienen una estrella en la frente, o un resplandor visible,
o un rayo que les salga de las orejas?
¡Dios mío!, dice Jaime. Tengo que ser papá o marido,
o trabajar en la fábrica como otro cualquiera, o andar,
como cualquiera, de peatón.
¡Eso es!, dice Jaime. No soy un poeta: soy un peatón.
Y esta vez se queda echado en la cama con una alegría dulce y
tranquila.

Jaime Sabines

domingo, noviembre 05, 2006

sábado, noviembre 04, 2006


I've done this before.
And I will do it again.
Come on and kill me baby,
while you smile like a friend.
And I'll come running,
Just to do it again.

You are the last drink I never should drunk.
You are the body hidden in the trunk.
You are the habit I can't seem to kick.
You are my secrets on the front page every week.
You are the car I never should have bought.
You are the train I never should have caught.
You are the cut that makes me hide my face.
You are the party that makes me feel my age.

Like a car crash I can see but I just can't avoid.
Like a plane I've been told I never should board.
Like a film that's so bad but I've gotta stay til the end.

Pulp: Like a friend